El RABINO BERGMAN Y UNA ORACIÓN POR LA PAZ ARGENTINA

El debate que tuvo lugar anoche entre el diputado porteño por el Pro, Sergio Bergman, y el intelectual ultrakirchnerista Eduardo Jozami, durante el programa ultraoficialista 678, dejó esta vez algo bueno para los argentinos de buena fe.

Se acercaban las 22.30, hora de culminación del ciclo, cuando el hombre de Dios reveló que había llevado, a modo de cierre de su participación, un petitorio destinado tanto al programa como al espacio Carta Abierta. Hasta ese momento, nadie, ni el rabino, imaginaban que ese petitorio se convertiría en una oración que hoy une a los argentinos nativos.

 "Tiene que ver con los temas del país de hoy, son cinco pedidos y tres deseos", anunció, ante la desconcertada mirada de Jozami. Quien no supo muy bien que responder.

Y allí desató sus sabias palabras:

“Entrevistar con objetividad, no editar la verdad única y absoluta.

Aceptar todas las diferencias.

Dialogar y confrontar ideas y no a las personas, tener razones, pero no enojarnos. Investigar para encontrar a los responsables.

Reconocer cuando uno comete un error, porque errar es humano.

Los puntos seis, siete y ocho.

No alienten a los que pretenden reformar a la Constitución Nacional, porque primero hay que cumplirla.

No le hagan creer a nadie que se puede ser eterno ni en el poder ni en la vida misma. Esforcemos para unirnos, no para dividirnos, ni en la sociedad ni en las familias.

Amén…”

Claro que el sabio hombre tuvo que soportar el escarnio de Jozami y el conductor del programa, pero la verdad estaba dicha y había llegado en boca de un humilde rabino que sólo quiere la paz y el amor entre los hombre, y que como el buen profeta, fue a llevar la luz allí donde está más oscuro. El petitorio de Sergio Bergman ya circula entre la buena gente de Barrio Parque, Palermo, y demás lugares de este país, como una oración para conjurar la violencia kirchnerista y pedir por la iluminación del corazón de nuestros representantes.

Fuente: La Nación